Blessing Okoedion es una víctima de la corrupción que estuvo en el Vaticano para contar su historia. Viajó desde Nigeria a España donde le habían prometido un trabajo como informática. Cuando llegó se dio cuenta de que era presa de las garras de la trata, pero fue valiente y lo denunció.
BLESSING OKOEDION
Víctima trata de personas
'Creo que es normal tener miedo, aunque el miedo nunca me impidió denunciarlos a la policía porque yo sabía que eran criminales. Ellos se aprovechan de que la situación laboral en nuestro país es precaria para traficar con mujeres'.
Blessing ha escrito el libro 'El coraje de la libertad' en el que cuenta su experiencia para alertar a otras mujeres y niñas del peligro que corren al abandonar su país para aceptar trabajos en el extranjero.
BLESSING OKOEDION
Víctima trata de personas
'En Italia y en otros países europeos deben saber que somos seres humanos, no deberían vernos como productos que pueden comprar, consumir y tirar cuando ya no lo necesitan'.
Las mafias y bandas criminales trafican con seres humanos como si fueran productos. Sor Gabriella Bottani, vive de cerca el sufrimiento de las víctimas, ella cree que incluso quienes trabajan para combatir la trata deben esforzarse más.
SOR GABRIELLA BOTTANI
Coordinadora, Talitha Kum
'Me di cuenta de que teníamos que trabajar para cambiar la mentalidad de cada uno de los que trabajamos contra la trata. Fue en el momento en el que empecé a trabajar en la red de religiosas contra la trata. Era un punto de partida para empezar a trabajar juntos en una red que va muy unida a la vida religiosa y que busca colaborar con todos promoviendo la dignidad humana y juntando fuerzas para lograr el bien común'.
La corrupción encuentra su espacio en todos los países. Uno de los más afectados es México, el tercero más peligroso del mundo. El crimen organizado y el narcotráfico están a la orden del día.
RAFAEL IBARRA
Programa Cultura de la Legalidad (Estado de México)
'La corrupción genera situaciones de inseguridad, la gente no es capaz de salir a la calle. En Ciudad Cuauhtemoc, una colonia del Estado de México. Un domingo de plaza, que es natural, la gente sale, la gente a las dos de la tarde en esta colonia no sale porque la inseguridad es tal, por la corrupción tal, que no hay presencia policial, el ministerio publico no opera, no hay a dónde denunciar, y la desesperación de las personas que viven es: 'Si salgo me asesinan''.
Quizá todas estas historias no sean suficientes para frenar un monstruo tan grande como la corrupción, pero en el Vaticano son conscientes de que el problema es grave y que para plantarle cara, deben trabajar todos juntos.
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