Después de cenar, el Papa se asomó al balcón de la nunciatura para saludar a estos visitantes. Eran 300 jóvenes egipcios que habían peregrinado para verle en el Cairo.
'Francisco, te queremosâ?.
Estuvo con ellos unos minutos y rezaron juntos un padrenuestro, cada uno en su idioma.
FRANCISCO
'...Y ahora me gustaría daros la bendición. Pero antes, que cada uno de vosotros piense a las personas a las que quiera mucho. Y ahora pensad también a los que no queráis. Y en silencio, que cada uno rece por estas personas, por los que quiere y por los que no quiereâ?.
El Papa les despidió bendiciéndolos, y bendiciendo también a las personas por las que habían rezado.
FRANCISCO
'Viva l'Egitto...â?
El día después por la mañana, antes de irse a la Misa Francisco salió a otro balcón, esta vez para rezar ante uno de los símbolos de Egipcio, el río Nilo.
JMB
CTV
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- BN
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