La historia de la iglesia que nunca llegó a construirse dentro del Coliseo de Roma

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14/04/2017
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Esta es la iglesia que se iba a construir dentro del Coliseo dedicada a los mártires cristianos. Un proyecto que, finalmente, no se llevo a cabo pero que hubiera transformado para siempre a este sí­mbolo de la cultura romana. 

FRANCESCO PROSPERETTI

Responsable de la exposición

'Hay una preciosa maqueta que muestra el santuario a los mártires cristianos proyectado por Carlo Fontana que hubiera transformado para siempre el sentido de la arena del Coliseo en una dimensión cristiana, festiva de estos mártires cristianos pero que se quedó en la fase de proyectoâ?.

La iglesia dentro de la arena nunca se edificó pero el Coliseo cada viernes santo rememora a los mártires cristianos con la ceremonia del Via Crucis presidida por el Papa. 

Estas y otras historias son las que explica la exposición 'Colosseo Un'iconaâ? en la que el Coliseo, por primera vez, se explica a sí­ mismo. 

FRANCESCO PROSPERETTI

Responsable de la exposición

'En esta ocasión hemos querido contar la historia de la imagen del Coliseo, una imagen potente, fortí­sima. Un nombre que se ha impuesto en los siglos, en milenios como el nombre de un lugar único. Con esta exposición estamos tratando de recorrer la vida, porque es realmente una vida que dura 2 milenios, de un monumento que ha cambiado muchas veces su funciónâ?.

Entre esas funciones está, por ejemplo, la de ser un hogar para familias durante la Edad Media. Estos restos dan testimonio de ello. Dentro del Coliseo trabajaron, comerciaron y vivieron cientos de personas que usaron estas vasijas y jarras, descubiertas durante las excavaciones realizadas en el siglo XIX. 


FRANCESCO PROSPERETTI

Responsable de la exposición

'Realmente la forma del Coliseo, la arquitectura del Coliseo es más fuerte que su propia función que durante los milenios ha cambiado tantas vecesâ?.

Porque el Coliseo fue una fábrica, un telar, un hospicio, un establo para animales, una cantera y, después del terremoto que lo dejó medio destruido en el siglo XIV, fue incluso una fortaleza. En la que estuvieron, por cierto, estas colosales estatuas y capitales que formaban parte de su decoración y que se conservan cuidadosamente como testigos en piedra de todas las vidas pasadas de este edificio. 

Y la muestra habla también de sus vidas futuras. Porque la potencialidad de este edificio ha inspirado a artistas y arquitectos de todas las épocas, incluso para imitarlo. Es el caso del llamado Coliseo cuadrado. Un intento del fascismo por apropiarse de un sí­mbolo de Roma. Benito Mussolini lo mandó construir para la Exposición Universal de 1942 que finalmente no se celebró por la II Guerra Mundial. 

Pero el Coliseo es único e irrepetible, basta solo con mirarlo para saber que no habrá nunca ningún otro edificio que represente tanto para una civilización. 

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