En su visita a Milán, el Papa se reunió con sacerdotes y religiosos en su espectacular Duomo.
Antes de comenzar, rezó delante del Santísimo Sacramento en la capilla llamada 'Scurolo di San Carlo'. Luego, el comenzó la reunión saludando a los asistentes.
FRANCISCO
'Rezad por míâ?.
'¡Sí, sí!â?.
Le hicieron tres preguntas, el Papa preparó las respuestas de antemano, en lugar de improvisar en el momento. Dos de las preguntas eran sobre la situación actual de sacerdotes y religiosos y sobre cómo pueden vivir su vocación plenamente a pesar de las dificultades.
FRANCISCO
'No hay que temer a los desafíos. ¿Cuántas veces oímos quejas: 'Ah, hoy en día hay tantos desafíos, estamos tristes ...'. No. No temáis. Más bien hay que temer una fe sin desafíos, una fe que se retiene completa, toda completa: sin necesidad de otras cosas, todo hecho. Esta fe está tan aguada que no sirve. Esto es lo que debemos temerâ?.
Además, habló sobre la importancia del discernimiento, especialmente en el diaconado, y sobre los peligros del clericalismo.
FRANCISCO
'A veces veo a algunos que ayudan en la liturgia: parece que quieran quitarle el puesto al cura. El clericalismo, ojo con el clericalismo. Y otra tentación, el funcionalismo: es una ayuda que tiene el cura para esto a para aquello...; es un chico para llevar a cabo ciertas tareas pero para otras no... No. Vosotros tenéis un carisma claro en la Iglesia y debéis construirloâ?.
Antes de marcharse rezó con todos y luego recorrió a pie la nave central para saludar a muchos de ellos.
MB
RR
-?
-BN
Up:AQ