En su homilía en Casa Santa Marta, el Papa Francisco explicó que un cristiano deja de ser fiel a Dios cuando no lo escucha y le da la espalda.
FRANCISCO
'Y estas dos cosas â?? no escuchar la Palabra de Dios y el corazón endurecido, cerrado en sí mismo â?? hacen que se pierda la fidelidad. Se pierde el sentido de la fidelidad. Dice la Primera Lectura, el Señor:â??La fidelidad ha desaparecidoâ??, y nos convertimos en católicos infieles, católicos paganos o, peor aún, en católicos ateos, porque no tenemos una referencia de amor a Dios vivoâ?.
Francisco también advirtió del peligro de que las comunidades cristianas busquen otros ídolos mundanos. Para evitarlo recomendó leer la Biblia a diario.
EXTRACTOS DE LA HOMILíA
(Fuente: Radio Vaticana)
'Y todos nosotros, si hoy nos detenemos un poco y miramos nuestro corazón, veremos cuántas veces â?? ¡cuántas veces! â?? hemos cerrado los oídos y cuántas veces nos hemos vuelto sordos. Y cuando un pueblo, una comunidad, digamos también una comunidad cristiana, una parroquia, una diócesis, cierra los oídos y se vuelve sorda a la Palabra del Señor, busca otras voces, otros señores, y termina con los ídolos, los ídolos que el mundo, la mundanidad, la sociedad, le ofrecen. Se aleja de Dios vivoâ?.
'Y estas dos cosas â?? no escuchar la Palabra de Dios y el corazón endurecido, cerrado en sí mismo â?? hacen que se pierda la fidelidad. Se pierde el sentido de la fidelidad. Dice la Primera Lectura, el Señor, allí: â??La fidelidad ha desaparecidoâ??, y nos convertimos en católicos infieles, católicos paganos o, peor aún, en católicos ateos, porque no tenemos una referencia de amor a Dios vivo. No escuchar y dar la espalda â?? lo que hace que se nos endurezca el corazón â?? nos lleva por el camino de la infidelidadâ?.
'Cada uno de nosotros hoy puede preguntarse: â??¿Me detengo a escuchar la Palabra de Dios? ¿Tomo la Biblia en la mano, que me está hablando a mí? ¿Mi corazón se ha endurecido? ¿Me he alejado del Señor? ¿He perdido la fidelidad al Señor y vivo con los ídolos que me ofrece la mundanidad de cada día? ¿He perdido la alegría del estupor del primer encuentro con Jesús?â??. Hoy es una jornada para escuchar. â??Escuchar, hoy, la voz del Señor, hemos orado. â??No endurezcan su corazónâ??. Pidamos esta gracia: la gracia de escuchar para que nuestro corazón no se endurezcaâ?.