El Papa se ha reunido con decenas de sacerdotes y de futuros sacerdotes, que participaron en un curso sobre cómo confesar. Les recordó que a ser buenos confesores se aprende con la vida. Y les dio tres consejos para conseguirlo:
- Que cultiven la oración para ser amigos de Dios. Así se darán cuenta de que ellos son pecadores y no tratarán con dureza a los penitentes.
- Que sean 'hombres de discernimientoâ?, que no aplican la misma receta a todas las personas.
- Que la confesión sea un momento de formación. Acercar a las personas a Dios con los consejos que se den.
FRANCISCO
'El confesor, de hecho, está llamado cotidianamente a ir a las periferias del mal y del pecado - ¡esta es una fea periferia!- y su obra representa una auténtica prioridad pastoralâ?.
Antes de irse el Papa les pidió que estén siempre disponibles para escuchar confesiones. Que no sean sacerdotes que confiesan 'sóloâ? los lunes, miércoles y sábados, sino cada vez que alguien lo pida, a la hora que sea.
JMB
CTV
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