El Papa Francisco ha traducido con hechos la preocupación por quienes pasan por situaciones difíciles.
Esta semana envió al responsable de cuidar de los pobres que piden ayuda al Vaticano a comprar alimentos a los pequeños comerciantes de las zonas afectadas por los terremotos en Italia.
Estos alimentos se han servido en los comedores de caridad del Vaticano.
El objetivo es animar a este sector de la población italiana a no perder la esperanza y a seguir luchando para rehacer sus vidas.
A principios de enero se reunió con muchos de ellos en uno de los encuentros más emotivos de los últimos meses en el Vaticano.
FRANCISCO
'Recomenzar, sí, pero recomenzar sin perder la capacidad de soñar, soñar con recuperarse, tener la osadía de soñar una vez másâ?.
También en octubre el Papa visitó por sorpresa las zonas más afectadas por los terremotos y rezó ante las ruinas de pueblos completamente devastados.
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