La JMJ de Panamá calienta motores. El arzobispo José Domingo Ulloa ha viajado a Polonia para intercambiar experiencias con la organización de la última Jornada Mundial de la Juventud.
Explica que la fase más delicada en estos momentos es la de preparar el alojamiento de los cientos de miles de peregrinos que viajarán a Panamá.
MONS. JOSÉ DOMINGO ULLOA
Arzobispo de Ciudad de Panamá
'Tenemos el lema: en cada joven peregrino acogemos a Jesús y esa es la primera motivación ahora. Ir buscando los lugares de alojamiento para los jóvenesâ?.
El arzobispo también viajó a Roma para reunirse con el prefecto del Dicasterio de Laicos, Familia y Vida, el cardenal Kevin Farrell.
Ambos estudiaron los próximos pasos. Por ejemplo, en la Ciudad Eterna, el 9 de abril, Domingo de Ramos, los jóvenes polacos entregarán la Cruz de la JMJ a los jóvenes de Centroamérica. Se trata de un gesto que sirve para valorar el papel de los jóvenes.
MONS. JOSÉ DOMINGO ULLOA
Arzobispo de Ciudad de Panamá
'La juventud necesita que les demos oportunidades y también que ellos puedan comprender que ellos mismos son los gestores de su presente y de su futuro y también corresponde a la sociedad de adultos que podamos creer de verdad en los jóvenesâ?.
En los próximos meses, probablemente en abril, también se conocerán el logo y el himno de la JMJ de Panamá, cuyo mariano lema es 'He aquí la sierva del Señor; hágase en mí según tu palabraâ?. Se trata de un tema que va muy en sintonía con el próximo sínodo que Francisco ha convocado en Roma; un sínodo sobre los jóvenes y la vocación.
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