Uno de los movimientos más extendidos es el de los Focolares, que acaban de celebrar un aniversario importante. Una de sus ramas, los 'Voluntarios de Dios', ha cumplido 60 años. Su historia está muy ligada a la represión soviética de la revolución de Hungría.
PATIENCE MOLLí? LOBí?
Responsable 'Voluntarias de Dios'
'Tras la revolución de Hungría, el Papa Pío XII dijo: 'Me gustaría que Dios estuviera presente en todas partes, en cada calle, en cada oficina'. Chiara Lubich, fundadora de los Focolares respondió a ese deseo y dijo: 'igual que hay gente dispuesta a cancelar el nombre de Dios, debería haber voluntarios dispuestos a llevarle de nuevo al mundo'.
Esos 'voluntarios' fueron las personas que ya en aquel entonces vivían la espiritualidad de los Focolares, pero que no estaban llamados a consagrarse a Dios. Hoy Patience Mollí¨ es su responsable mundial.
PATIENCE MOLLí? LOBí?
Responsable 'Voluntarias de Dios'
'Los 'Voluntarios de Dios' son una de las ramas más grandes de los Focolares. Están en todo el mundo, en todas las naciones. Son personas normales que quieren llevar a Dios allá donde están: a sus familias, a sus trabajos, allá donde estén. Chiara Lubich los llamaba 'los primeros cristianos del siglo XX'.
Estos tres voluntarios húngaros recuerdan los paralelismos entre los valores de la revolución y su decisión de entregarse a Dios.
Bernadett Marek
'Cuando estalló la revolución yo era estudiante. Quise bajar a la calle para ayudar y participar. Pero mi madre se puso delante de la puerta, me encerró y no pude salir. Igual que en la Revolución del 56 las personas participaron libremente y dieron su vida, yo con esa misma libertad quiero vivir mi vida cada día, allí donde Dios me ponga'.
Október Kovács
'Cuando nací, en honor de la revolución mis padres me llamaron Október, Octubre. De pequeño, a causa de mi nombre, muchos se burlaron de mí. Pero, como mis padres me educaron al espíritu patriota y los valores cristianos, estoy orgulloso de llevarlo y de ser un monumento viviente'.
János Frivaldszky
'Dos días después de la Revolución subimos a los tanques rusos para entablar una relación humana. Pero en seguida ese sueño se esfumó. Mucho después pudimos cumplirlo. Considero como un hermano a quien tengo cerca, también a esos pueblos con los que convivimos durante siglos pero que desde hace tiempo miramos con desconfianza'.
Hoy hay unos 23 mil 'Voluntarios de Dios' en todo el mundo. No son sólo católicos. Son personas de diversas religiones y de cualquier profesión y clase social que se han comprometido a seguir a Dios viviendo en el día a día la espiritualidad de los Focolares. O sea, construir unidad y fraternidad entre las personas y los grupos, independientemente de su origen, raza o religión.