Angela es de Amatrice, el epicentro de la tragedia del 24 de agosto, y define así cómo fue el terremoto.
ANGELA
'Nuestra ciudad necesitará tiempo porque es como si hubiese sido destruida por una guerraâ?.
Y a juzgar por las imágenes es una de las mejores comparaciones. 280 personas perdieron la vida en segundos. Sin embargo, dice que ese día vivió un milagro.
ANGELA
'He perdido mi casa pero me siento como si hubiera vivido un milagro porque mi familia entera, incluyendo a mi hijo y a sus dos niños pequeños, pudo salir ilesa de casa. Somos una de las pocas familias afortunadasâ?.
Son las historias de algunos de los supervivientes de los terremotos que mantuvieron un encuentro con el Papa Francisco. Para muchos sus palabras improvisadas han sido una auténtica inyección de esperanza. Así lo siente Anna, de Norcia, donde no hubo víctimas mortales pero sí importantes destrozos.
ANNA
'Tenemos que volver a empezar como una gran familia, poco a poco. Volveremos a empezar, como todos. No somos ni los primeros ni los últimos. Es verdad que es muy duro, muy duro, pero tenemos que ser fuertes y el Papa nos ha dado la esperanza para seguir adelanteâ?.
Ha sido un día de emociones intensas para todas estas personas... Y no solo por estar en el Vaticano con el Papa.
FLAVIA
'Ha sido un día muy emocionante también porque hemos visto a muchos paisanos. Después del terremoto nos dispersamos todos y el hecho de no vernos más ha sido muy dolorosoâ?.
Esta abuela de Norcia ha tenido hoy también otro motivo de alegría. Su nieta pudo hablar con el Papa Francisco.
ELETTRA
'El Papa me ha dado la manoâ?.
'- ¿Cómo te has sentido?â?
'Contenta y emocionadaâ?.
Todas estas personas han venido hasta el Vaticano para devolver la visita que Francisco les hizo el 4 de octubre pasado. Por sorpresa, el día de su santo, el Papa quiso estar en medio de las ruinas del terremoto para dar su consuelo y cercanía a quienes perdieron tanto en tan poco tiempo.
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