Manuel González nació en 1877 en Sevilla (España), fundó la Congregación de las Hermanas Misioneras Eucarísticas de Nazaret y era conocido como el 'Obispo del Sagrario Abandonado'.
Las hermanas Maria Teresa y Mónica María pertenecen a esta congregación y encarnan su mensaje.
H. MARIA TERESA CASTELLí?
Misioneras Eucarísticas de Nazaret
'Y llega a ese pueblo, delante del sagrario, y se encuentra que no hay nadie en la iglesiaâ?.
'Y ahí pues se da cuenta de que Jesús ha venido a darnos vida, está en la Eucaristía, en esa presencia eucarística, y allí no encuentra a nadie, es decir, está solo. Por eso el hecho de que él dice que quiere ser el obispo del sagrario abandonadoâ?.
Manuel González acuñó una expresión que describe el propósito de su vida: 'eucaristizarâ? el mundo. Para conseguirlo fundó la Congregación de las Misioneras Eucarísticas de Nazaret.
H. Mí?NICA MARíA YUAN
Misioneras Eucarísticas de Nazaret
'Él habla de la importancia de enterarse de que Jesús, de que Dios nos ama y está vivo en cada sagrario, siempre en la Eucaristía. Entonces nuestra misión es ayudar a que la gente descubra esto, el regalo que Dios nos está haciendo a cada instante, en cada misa, en cada sagrario. Entonces, todo lo que hacemos tiende a esoâ?.
Con su canonización, la congregación que él mismo fundó espera que se conozca aún más la inquebrantable fe en Dios del obispo Manuel González.
H. Mí?NICA MARíA YUAN
Misioneras Eucarísticas de Nazaret
'Lo que podemos aprender de él es que no estamos solos. Que Dios está siempre con nosotros y de nuestro lado. No importa qué tan pobres o miserables que somos. Incluso cuando lo abandonamos, cuando nos alejamos ... Él nunca va a salir de nuestro ladoâ?.
Un mensaje muy parecido al que el Papa Francisco está proponiendo durante el Jubileo, y que será recordado este domingo cuando Manuel González sea canonizado en Roma junto con otros seis beatos.
AG/JMB
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