El Papa visitó por sorpresa varias poblaciones italianas devastadas por el terremoto del 24 de agosto.
Comenzó en esta escuela, que se ha organizado en una habitación prefabricada.
Allí saludó a este hombre que perdió a su mujer y a dos hijos en el terremoto.
Luego se acercó a la llamada 'zona rojaâ?, la más afectada por el terremoto. Allí dio las gracias a los bomberos, por haber salvado vidas.
'Su visita es un mensaje importante para la gente, pero también para quienes estamos trabajando aquíâ?.
'Estas personas lo han perdido todoâ?.
'He venido para ayudar a mirar hacia adelanteâ?.
Luego rezó en silencio ante las toneladas de ruinas.
Después fue a una residencia de ancianos en la que atienden a enfermos crónicos y personas que necesitan ayuda especial. Muchos de ellos se quedaron sin casa por el terremoto.
Visitó Accumoli, una de las poblaciones más afectadas. Y rezó ante las ruinas de la iglesia de San Francisco.
El Papa se quedó sin palabras ante la destrucción...
Algunos no pudieron contener las lágrimas por esta visita. El Papa les decía que quería rezar con ellos y decirles que no están solos.
Más adelante detuvo el coche para hacerse una idea de lo ocurrido.
'Este era un pueblo estupendoâ?.
Además vio esta escuela levantada en tiendas de campaña.
Acabó la visita en San Pellegrino de Norcia, ante esta iglesia.
'Ahí estaba el campanarioâ?.
Y allí, también en silencio, bendijo las ruinas.
JMB
CTV
VM
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