Son los doce jóvenes que almorzaron con el Papa Francisco pocos minutos antes de que llegara. Algunos le saludaron en su propio idioma y otros se atrevieron con el español.
El Papa bendijo la mesa con esta curiosa fórmula.
'Buen provecho y santa alegría'.
Cada uno de los jóvenes se presentó al Papa y algunos hasta le llevaron un regalo. Estuvieron almorzando durante una hora y media en la que Francisco respondió a sus preguntas. Por ejemplo les dio consejos para evangelizar e intercambió con ellos algunas anécdotas. Tan solo quiso hacerles una pregunta.
PAULA ANDREA MORA
'Él quería escucharnos porque bueno en algún momento le dijimos: 'Bueno Santo Padre, quizá quiere hacernos algunas preguntas'. Y el dijo: 'Yo quiero escucharlos'. Y así fue. Solamente nos hizo una pregunta que fue '¿qué es para ustedes la confesión?'.
Paula asegura que al despedirse, el Papa Francisco le dijo que ojalá se vean pronto.
PAULA ANDREA MORA
'Le dije: 'Bueno Santo Padre, el próximo año es a Colombia.' Y él me dijo: 'Sí el viaje a Colombia está programado. Y al final cuando nos despedimos me dijo algo como muy coloquial como, 'bueno, nos vemos en Colombia'.
Tan distendido fue el clima que hubo ocasión hasta para un selfie, al que el Papa se prestó encantado.