Caritas denuncia que la situación humanitaria en Sudán del Sur es una de las peores del planeta en estos momentos.
MICHEL ROY
Secretario General, Caritas Internationalis
'Es una guerra olvidada. Tanto que incluso tenemos dificultades para recaudar los fondos que necesitamos. A todas las organizaciones humanitarias les sucede esto. Hay personas que están muriendo de hambre hoy en Sudán del Sur y es inaceptable. Tenemos que remediarloâ?.
Se trata de una guerra tan olvidada que ni siquiera hay balances fiables sobre el número de víctimas y desplazados. Se estima que unos 2 millones trescientas mil personas han tenido que abandonar sus hogares; que más de 6 millones, la mitad de su población, necesitan ayuda alimentaria urgente y que unos 15.000 niños soldados han sido reclutados.
MICHEL ROY
Secretario General, Caritas Internationalis
'Todo el país está en guerra y ha sido destruido. No había mucho antes pero ahora es peor. Es realmente una situación terrible, una de las peores que hay en el mundo hoy en díaâ?.
Desde 2013 Sudán del Sur está inmerso en una atroz guerra civil entre los partidarios de su presidente Salva Kiir, de la etnia dinka, y su oponente y exvicepresidente Riek Machar, de la etnia nuer. Razones políticas, étnicas e intereses extranjeros desangran al país más joven del mundo. Y es que su vecino del norte nunca vio con buenos ojos la independencia de una parte de los sudaneses.
MICHEL ROY
Secretario General, Caritas Internationalis
'No es solo responsabilidad de los ciudadanos de Sudán del Sur, también de Sudán del Norteâ?.
Según la ONU, 6 de cada 10 personas ha perdido un familiar en una guerra en la que se han cometido crímenes inhumanos. Un reciente informe documenta violaciones en masa de mujeres y niñas como forma de pago para los rebeldes e incluso para los soldados gubernamentales, quema de personas vivas o asfixiadas en grupo en contenedores y ejecuciones masivas en campos de la muerte.
Algunas fuentes hablan de 300.000 víctimas mortales, casi tantas como las de los cinco años de guerra en Siria. Para los analistas, la ausencia de cifras fiables supone la impunidad sobre estos crímenes y la garantía de que se seguirán produciendo.
Varias organizaciones humanitarias han retirado a sus efectivos de la zona. Caritas Sudán del Sur continúa auxiliando casi sin fondos a una población cuya desgracia nunca será portada de los periódicos.
AC
MG/Unifeed
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