La Gendarmería Vaticana ha arrestado e interrogado a un alto cargo Vaticano y a una mujer por un caso de supuesto 'robo y divulgación de noticias y documentos reservadosâ?. Se trata del español Lucio Angel Vallejo Balda y de la italiana Francesca Chaouqui.
Mientras que la italiana está en libertad vigilada por haber colaborado con la investigación, el sacerdote sigue en prisión.
Lucio Angel Vallejo Balda era el número dos de la prefectura de Asuntos Económicos. El Papa Francisco le confió en julio de 2013 la coordinación de un grupo de trabajo para reformar las instituciones económicas y administrativas del Vaticano. Francesca Chaouqui era uno de los miembros de esa comisión.
Esta semana se publicará en Italia un libro que incluye grabaciones de palabras del Papa, probablemente pronunciadas en las reuniones a puerta cerrada de esta comisión de trabajo.
Así explicaba Lucio íngel Vallejo el trabajo que le había confiado el Papa.
MONS. LUCIO íNGEL VALLEJO
Secretario, Prefectura de Asuntos Económicos
'Tenemos la indicación clara del Papa es de más transparencia después de una mejor gestión. Yo ya no me atrevería a hablar tanto de austeridad porque la Santa Sede en general es bastante austera sino sobre todo una mejor gestión que ahorre recursos; que pueda ser más eficaz para poder liberar recursos para otras cosas que son más necesarias. Eso que tantas veces dice el Papa..., también nos lo ha dicho: cuando tenéis que hacer un gasto extraordinario pensad que hay gente que está pasando hambreâ?.
Mientras la investigación sigue abierta, el portavoz del Vaticano dice que este libro es 'fruto de una grave traición de la confianza del Papaâ?, y que sus autores se beneficiarán de 'un acto gravemente ilícito de entrega de documentos reservadosâ?.
Recuerda que 'este tipo de publicaciones no contribuyen a establecer claridad y verdad, sino a generar confusión e interpretaciones parciales y tendenciosasâ?. Dice que en ningún caso ayudan a la misión del Papa.
En la primavera de 2012 estalló el caso Vatileaks, cuando el mayordomo del Papa robó y filtró documentos del escritorio de Benedicto XVI. En aquel entonces, Paolo Gabriele fue condenado a 18 meses de prisión, pero el Papa le concedió la amnistía y le proporcionó un nuevo trabajo.
JMB
RR