Los obispos del Sínodo han comenzado su reflexión sobre la misión de la familia en el mundo de hoy. Afrontan así la última parte del documento de trabajo, tras varias jornadas dedicadas a los desafíos de la familia y su vocación.
MONS. BERNARDO MIGUEL BASTRES
Obispo de Punta Arenas (Chile)
'Es una semana importante porque tendremos que definir, o estar de acuerdo, sobre el proyecto que Dios tiene sobre familia y de qué manera estamos nosotros transmitiendo ese proyecto a nuestras comunidadesâ?.
La preparación de los novios para el matrimonio o la formación de los sacerdotes en la pastoral familiar son algunos de los temas que se tratarán en la recta final del Sínodo.
Preparación de los novios
Los obispos propondrán una catequesis más intensa para quienes se van a casar. Consideran que es necesaria más formación ante algunos modelos actuales que contrastan con la visión cristiana de la familia.
Sacerdotes y pastoral familiar
El documento de trabajo sugiere estudiar cómo preparar mejor a los sacerdotes para que ayuden eficazmente a las familias. Una de las propuestas es que los seminaristas hagan más visitas a las familias y conozcan sus necesidades de primera mano. Los obispos valorarán también si incluir o no nuevas materias sobre la familia en la formación de los seminaristas.
MONS. PETER KANG
Presidente, Conferencia Episcopal de Corea
'Podrían formarse como especialistas en el asesoramiento de las cuestiones familiares. Muchos sacerdotes no han tenido la posibilidad de formarse profesionalmente en ese campoâ?.
Acompañamiento del matrimonio
Los obispos también buscarán fórmulas para acompañar a los matrimonios en sus primeros pasos como casados. Una propuesta del documento de trabajo es que cada parroquia cuente con matrimonios experimentados que ayuden a los nuevos esposos en sus dudas y dificultades.
P. ROBERTO ROSA
Párroco de San Giacomo en Trieste (Italia) y padre sinodal
'Algunas veces las familias se encuentran aisladas y cuando tienen problemas piensan que son los únicos que los tienen. Pero en contacto con otras familias se encuentran con la fuerza para superar los problemas ayudándose unos a otros, reconociéndolos en el otroâ?.
Curar las heridas
Por último los obispos del Sínodo repasarán algunas situaciones dolorosas que reclaman una especial cercanía y cariño, como las personas que han sufrido la separación o el divorcio, las personas con tendencia homosexual o las familias monoparentales. El Sínodo quiere mostrar que la Iglesia no les abandona y les acompañar para darles nueva fuerza y esperanza.
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UP: JMB
