La siguiente parada del Papa tras su encuentro con el presidente Barack Obama fue con el episcopado de Estados Unidos en la catedral de San Mateo de Washington, un lugar con mucha historia, donde por ejemplo, se celebró el funeral de Estado del presidente John F. Kennedy.
Durante el trayecto en el papamóvil pasó por lugares emblemáticos de la ciudad de Washington como el obelisco, rodeado siempre de una multitud entusiasta que, literalmente, se lanzaba a sus brazos.
Decenas de obispos venidos de todos los rincones del país escucharon una extensa y alentadora catequesis del Papa centrada en los desafíos de la Iglesia y la sociedad norteamericana a los que deben responder como pastores.
FRANCISCO
'No he venido para juzgarles o para ipartir lecciones. Permítanme tan sólo, con la libertad del amor, que les hable como un hermano entre hermanosâ?.
Alabó su 'firme compromiso a favor de la vida y de la familiaâ?, y les dijo que sigue con 'enorme atenciónâ? el 'esfuerzo que realizan para acoger e integrar a los inmigrantesâ? que llegan a Estados Unidos.
FRANCISCO
'Acójanlos sin miedo. Estoy seguro de que, una vez más, esta gente enriquecerá a su país y a su Iglesiaâ?.
También recordó una herida particular, 'la heridaâ? que sufrió la Iglesia en los últimos años. No lo nombró explícitamente pero se refería a los casos de abusos sexuales cometidos por sacerdotes o religiosos a menores, en ocasiones encubiertos o mal gestionados por los propios obispos.
El Papa alabó la 'valentíaâ? de los que afrontaron estos momentos difíciles sin temer la autocrítica y la humillación, al tiempo que manifestó su preocupación para que esos casos no se repitan.
FRANCISCO
'Sé cuánto les ha hecho sufrir la herida de los últimos años, y he seguido de cerca su generoso esfuerzo por curar a las víctimas, consciente de que, cuando curamos, también somos curados, y por seguir trabajando para que esos crímenes no se repitan nunca másâ?.
Francisco les advirtió que alejen de sí la autorreferencialidad, la 'tentación del narcisismoâ?, que sean personas siembren unidad y no división, que no eludan afrontar cuestiones difíciles de nuestro tiempo.
FRANCISCO
'Las víctimas inocentes del aborto, los niños que mueren de hambre o bajo las bombas, los inmigrantes que se ahogan en busca de un mañanaâ?.
Los católicos en Estados Unidos son unos 70 millones de habitantes, un 24% de la población, y gran parte de ellos son de procedencia latinoamericana.
JRB
CTV
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