Francisco se reunió con los representantes de las 6 mayores comunidades religiosas de Albania: musulmanes, bektashis, católicos, ortodoxos, evangélicos y judíos.
El Papa les dijo que este encuentro es un signo de la convivencia interreligiosa y recordó las consecuencias de excluir a Dios de la sociedad.
FRANCISCO
'Cuando, en nombre de una ideología, se quiere expulsar a Dios de la sociedad, se acaba por adorar ídolos, y en seguida el hombre se pierde, su dignidad es pisoteada, sus derechos violados'.
Francisco dijo que la auténtica libertad religiosa promueve el respeto y el diálogo y nada tiene que ver con el sectarismo.
FRANCISCO
'No podemos dejar de reconocer que la intolerancia con los que tienen convicciones religiosas diferentes es un enemigo particularmente dañino, que desgraciadamente hoy se está manifestando en diversas regiones del mundo'.
Los creyentes deben rechazar la distorsión de la religión, explicó Francisco que, con contundencia, pidió que no se use la fe como pretexto para matar.
FRANCISCO
'Nadie puede usar el nombre de Dios para cometer violencia. Matar en nombre de Dios es un gran sacrilegio. Discriminar en nombre de Dios es inhumano'.
El Papa habló de dos actitudes para promover la libertad religiosa: considerar a todos los hombres como hermanos y ponerse al servicio de los demás en favor del bien común.
A un lado y a otro de la sala, los líderes religiosos escucharon atentamente el discurso de Francisco que bromeó con la disposición de los invitados.
FRANCISCO
'Con un poco de sentido del humor, se puede decir que parecen dos equipos de fútbol: los católicos y enfrente todos los demás'.
Tras arrancar una sonrisa a los presentes, el Papa les pidió que siempre dialoguen partiendo de su propia identidad religiosa, sin hipocresía.