El cardenal Giacomo della Chiesa fue elegido Papa en la décima votación durante el tercer día de cónclave. Era 3 de septiembre de 1914 y tomó por nombre Benedicto XV. Fue un Papa que pasó a la historia como un buscador de paz.
Aunque su pontificado no fue sencillo. Se encontró con una Europa desgarrada por el odio.
P. BERNARD ARDURA
Presidente, Pontificio Comité Ciencias Histórica
'Era un periodo en el que los nacionalismos estaban exhacerbados. El patriotismo y el amor a la patria son una virtud pero el nacionalismo es exclusivo. No es tanto amor a la patria sino exclusión de todo lo demás. Benedicto XV se encontró con esta circunstancia'.
Vivió de lleno la I Guerra Mundial. Dedicó su primera encíclica, 'Ad beatissimi apostolorum', a pedir la paz y a analizar las causas del conflicto que definió como 'masacre inútil' y como 'la tragedia más oscura del odio y de la demencia humana'. Con él, la Santa Sede adoptó la imparcialidad frente a la guerra, postura que le costó las críticas de los países en conflicto.
Incluso escribió una exhortación apostólica, 'Dès le début', dirigida los jefes de estado en la que detallaba cómo llegar a un armisticio.
Sin embargo, sus llamamientos fueron ignorados y la guerra continuó hasta noviembre de 1918, dejando un saldo de más de diez millones de muertos.
También impulsó la semana de oración por la unidad de los cristianos y la Congregación para las Iglesias Orientales. Además durante su pontificado se promulgó el Código de Derecho Canónico.
Canonizó a Juana de Arco y trabajó por el diálogo interreligioso. En Turquía un monumento le recuerda como 'bienhechor de los pueblos'.
Benedicto XV, conocido como el Papa de la paz, falleció el 22 de enero de1922 en Roma a causa de una grave pulmonía.
