El Papa enviará en su nombre a Irak al cardenal Fernando Filoni para expresar su cercanía espiritual a la población que sufre y para llevar la solidaridad de la Iglesia. Los cristianos de Irak están siendo víctimas de la persecución religiosa emprendida contra ellos por los radicales del Estado Islámico, un grupo yihadista que se ha apoderado de parte del país.